Mantenimiento de dúmperes rígidos para prolongar su vida útil

Mantenimiento de dúmperes rígidos

Los dúmperes rígidos son auténticos colosos diseñados para soportar cargas extremas en entornos exigentes como minas, canteras o grandes obras civiles. Su potencia es indiscutible, pero precisamente por ello necesitan un mantenimiento a la altura. No se trata solo de evitar averías: hablamos de prevenir paradas imprevistas, alargar la vida útil de la máquina y proteger la inversión que representa cada unidad.

En este artículo vamos a abordar todo lo que necesitas saber para mantener tu dúmper rígido como el primer día. Hablaremos de tipos de mantenimiento, componentes clave que requieren atención periódica, fallos frecuentes que puedes prevenir y buenas prácticas que marcan la diferencia. Además, si trabajas con modelos como los Hitachi EH3500AC-3, EH4000AC-3 o EH5000AC-3, también te daremos consejos específicos para su cuidado. Y si prefieres dejarlo en manos expertas, descubrirás cómo el servicio de mantenimiento de Comercial Truckma puede ayudarte, incluso si no compraste tu maquinaria con ellos.

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    ¿Por qué es crucial el mantenimiento en los dúmperes rígidos?

    Los dúmperes rígidos no son simples vehículos de carga: son el núcleo operativo de muchas actividades en minería, obra civil y reciclaje industrial. Cada jornada de trabajo supone un desgaste intensivo para todos sus componentes, desde la transmisión hasta el sistema hidráulico, pasando por frenos, suspensión o neumáticos.

    Si esta maquinaria no se mantiene en óptimas condiciones, el coste no solo se mide en averías: también se traduce en menor productividad, mayor consumo de combustible, riesgos para los operarios y, en definitiva, una pérdida directa de rentabilidad para el negocio.

    Además, no estamos hablando de maquinaria común. Estas unidades pueden transportar más de 300 toneladas por ciclo, lo que multiplica exponencialmente la presión a la que están sometidas. Por eso, el mantenimiento no es una tarea secundaria, sino una estrategia esencial para asegurar su rendimiento y su longevidad.

    Impacto en el rendimiento y la seguridad

    Cuando un dúmper rígido no se mantiene correctamente, el primer síntoma suele ser una pérdida de rendimiento. Esto puede reflejarse en:

    • Aumento del consumo de combustible

    • Disminución de la capacidad de frenado

    • Vibraciones excesivas que afectan la estabilidad y la comodidad del operario

    • Menor capacidad de respuesta en terrenos complicados

    Pero más allá del rendimiento, lo realmente crítico es el impacto en la seguridad del equipo humano. Un fallo inesperado en la dirección, una fisura no detectada en el chasis o un defecto en la suspensión puede traducirse en:

    • Paradas forzosas en plena operación

    • Riesgos de vuelco en terrenos irregulares

    • Posibles accidentes con consecuencias graves

    En entornos donde el margen de error es mínimo, cualquier descuido técnico puede tener consecuencias irreversibles. Por eso, realizar revisiones periódicas no es opcional: es lo que garantiza que el dúmper responda como debe en cada maniobra y que cada jornada comience con la confianza de estar operando con seguridad.

    Costes evitables a largo plazo

    A menudo se percibe el mantenimiento como un gasto, cuando en realidad es una inversión clave para reducir imprevistos y ahorrar a medio y largo plazo. Saltarse revisiones técnicas puede parecer una forma de ahorrar, pero termina generando problemas mucho más costosos.

    Un plan de mantenimiento preventivo permite:

    • Detectar desgaste en componentes clave antes de que fallen

    • Programar intervenciones rápidas y menos costosas

    • Evitar la paralización total de la máquina

    • Reducir el consumo energético al mantener los sistemas en su punto óptimo

    • Alargar considerablemente la vida útil del equipo

    Además, una máquina cuidada necesita menos esfuerzo para operar, lo que también mejora la experiencia del operario y reduce la fatiga mecánica de todos los sistemas involucrados.

    Consejo experto: “La diferencia entre una avería crítica y una intervención a tiempo suele estar en una revisión que se pospuso. Cuida tu dúmper como cuidas tu inversión: con previsión, no con improvisación.”

    Tipos de mantenimiento aplicables a un dúmper rígido

    El mantenimiento de un dúmper rígido no es un proceso único ni estandarizado: debe adaptarse al tipo de uso, a las condiciones del terreno, a las cargas que soporta y al entorno en el que trabaja. No es lo mismo operar en una mina con pendientes pronunciadas que en una planta de reciclaje a nivel del suelo. Sin embargo, hay una estructura clara de enfoques que permiten mantener estas máquinas en las mejores condiciones posibles, independientemente del entorno.

    Conocer los tipos de mantenimiento que se pueden aplicar no solo ayuda a prevenir averías, sino que también permite anticiparse a los ciclos de desgaste y optimizar la planificación de recursos técnicos y humanos. El objetivo no es reaccionar ante el fallo, sino evitar que ocurra.

    A continuación, repasamos los tres enfoques fundamentales de mantenimiento en maquinaria pesada como los dúmperes rígidos:

    Mantenimiento preventivo: base para alargar la vida útil

    Es el más conocido y, sin duda, el más recomendable. Consiste en realizar inspecciones, ajustes y sustituciones de componentes de forma planificada y periódica, antes de que se produzcan fallos.

    Entre las acciones típicas que incluye el mantenimiento preventivo se encuentran:

    • Cambios regulares de aceite y filtros

    • Revisión del sistema hidráulico

    • Inspección de frenos, neumáticos y suspensiones

    • Comprobación de niveles y fugas en todos los fluidos

    • Lubricación de puntos críticos

    • Diagnósticos electrónicos para detectar fallos incipientes

    Este tipo de mantenimiento está orientado a la prevención total. Permite mantener los niveles de productividad sin interrupciones inesperadas y prolonga la vida útil del dúmper a niveles muy superiores a los de una unidad descuidada.

    Una flota con mantenimiento preventivo riguroso no solo trabaja más, sino que lo hace mejor y durante más años.

    Mantenimiento correctivo y predictivo: cuándo y por qué

    El mantenimiento correctivo es aquel que se realiza después de que ha ocurrido una avería. Suele implicar un mayor coste, tanto en tiempo como en repuestos, y a menudo requiere parar por completo la operación. Aunque es inevitable en determinados momentos, su uso debe ser siempre la excepción, no la regla.

    Por otro lado, el mantenimiento predictivo es una estrategia más avanzada, que se apoya en tecnologías como sensores, análisis de vibraciones o temperatura y sistemas de monitorización en tiempo real. El objetivo es anticipar el fallo antes de que se manifieste. Este enfoque es especialmente útil en maquinaria de alta carga de trabajo como los dúmperes rígidos, ya que:

    • Permite intervenir justo en el momento óptimo

    • Reduce al mínimo los tiempos de parada

    • Mejora la planificación de los recambios y el personal técnico

    • Evita costes innecesarios por reemplazos prematuros

    Muchas empresas están combinando el mantenimiento preventivo tradicional con técnicas predictivas, obteniendo una visión completa del estado real de cada equipo.

    Recomendación profesional: “Si puedes prever cuándo un componente va a fallar, tienes el control. Si esperas a que falle, lo tiene la avería.”

    Revisión técnica clave en dúmperes rígidos

    Un dúmper rígido es una máquina compleja, con múltiples sistemas trabajando de forma simultánea bajo condiciones extremas. Detectar a tiempo los signos de desgaste o fallo en sus componentes principales puede suponer la diferencia entre una intervención puntual y una avería crítica que deje el equipo fuera de servicio durante días. Por eso, es esencial tener claro qué elementos deben revisarse con más frecuencia y rigor.

    Esta revisión técnica no debe limitarse a una simple inspección visual. Cada componente clave requiere una evaluación específica, con herramientas, protocolos y personal cualificado. Además, es recomendable registrar cada revisión en un historial técnico que permita detectar patrones o anomalías recurrentes.

    Veamos los grupos de componentes que merecen atención prioritaria en el mantenimiento de un dúmper rígido.

    Neumáticos, suspensión y sistema de frenado

    Estos tres elementos están directamente relacionados con la estabilidad, la seguridad y el control del dúmper. Cualquier fallo en esta tríada puede provocar una pérdida de tracción, un vuelco o un frenado insuficiente.

    Aspectos clave a revisar:

    • Neumáticos: presión, cortes, desgaste irregular, deformaciones. Un neumático dañado puede reventar con la máquina en carga.

    • Suspensión: estado de los componentes del sistema de brazos oscilantes, amortiguadores o struts como los NEOCON, habituales en modelos Hitachi. Es vital comprobar que absorben correctamente impactos y no presentan fugas.

    • Frenos: revisar discos, pastillas, sistemas hidráulicos, acumuladores y sistemas de freno eléctrico (en modelos con AC Drive). El sistema debe responder sin retrasos y mantener su potencia incluso con la máquina completamente cargada.

    Una revisión inadecuada de estos sistemas puede no solo comprometer la operatividad, sino poner en riesgo a los operadores y a la propia maquinaria.

    Motor, transmisión y componentes hidráulicos

    El corazón del dúmper y su sistema circulatorio. Su revisión debe ser meticulosa, ya que el desgaste interno es silencioso pero letal para la máquina si no se detecta a tiempo.

    Qué no se puede pasar por alto:

    • Motor: consumo anormal de aceite, temperaturas elevadas, ruidos extraños o pérdida de potencia. Revisar turbocompresores, inyectores, filtros y sistema de refrigeración.

    • Transmisión: comprobar el estado del convertidor de par, niveles y color del aceite, vibraciones al cambiar de marcha, desgaste en embragues.

    • Sistema hidráulico: fugas en latiguillos, pérdida de presión, calentamiento excesivo del aceite hidráulico, válvulas defectuosas o cilindros que no extienden/retraen con fluidez.

    Estos sistemas están interconectados: un fallo en uno puede afectar al resto. Por eso, conviene tratarlos como un todo, y no como áreas aisladas.

    Sistema eléctrico y controles electrónicos

    En los modelos más modernos —como los Hitachi EH3500, EH4000 y EH5000— la electrónica juega un papel fundamental tanto en el rendimiento como en la seguridad.

    Puntos críticos de revisión:

    • Sensores y cableado: conexiones sueltas, oxidaciones, cables pelados o mal aislados.

    • Módulos de control: errores de software, alertas recurrentes en pantalla, problemas de comunicación entre subsistemas.

    • Instrumentación de cabina: pantalla LCD, medidores de carga, velocímetro, sensores de inclinación y cámaras perimetrales. Todo debe estar calibrado y funcional.

    La detección temprana de fallos eléctricos evita errores de lectura, bloqueos inesperados o malfuncionamiento de sistemas como el retarder eléctrico, el control de tracción o el sistema de frenado automático.

    Fallos comunes en dúmperes rígidos que puedes evitar con una buena revisión

    A pesar de estar diseñados para resistir condiciones extremas, los dúmperes rígidos no están exentos de sufrir averías. En muchos casos, los fallos más habituales comparten un mismo origen: revisiones incompletas, tardías o mal ejecutadas. Esto genera pequeñas incidencias que, si no se detectan a tiempo, acaban derivando en reparaciones costosas o incluso en la sustitución completa de componentes clave.

    Conocer cuáles son los problemas más frecuentes en este tipo de maquinaria no solo te permite anticiparte, sino también establecer prioridades dentro del plan de mantenimiento.

    A continuación, repasamos algunos de los fallos más comunes y cómo puedes prevenirlos con una inspección técnica eficaz.

    1. Sobrecalentamiento del motor o del sistema hidráulico

    Uno de los fallos más recurrentes, sobre todo en jornadas prolongadas o en ambientes con altas temperaturas. El sobrecalentamiento puede deberse a:

    • Acumulación de suciedad en radiadores o filtros

    • Bajo nivel de refrigerante o aceite

    • Fallo en bombas o válvulas de presión

    • Uso de lubricantes inadecuados

    Cómo prevenirlo:
    Revisar y limpiar los sistemas de refrigeración con frecuencia, controlar los niveles antes de cada jornada y utilizar fluidos recomendados por el fabricante. Además, es esencial prestar atención a cualquier alerta térmica desde los sensores de cabina.

    2. Pérdidas de presión en el sistema de frenos

    Una pérdida de presión en el circuito hidráulico de freno puede pasar desapercibida hasta que el sistema deja de responder con precisión. En maquinaria de gran tonelaje, esto puede convertirse en un fallo crítico.

    Síntomas de alerta:

    • Mayor recorrido del pedal de freno

    • Disminución progresiva de la potencia de frenado

    • Activación de alertas en el sistema de diagnóstico

    • Sonidos inusuales al aplicar los frenos

    Cómo prevenirlo:
    Verificar periódicamente el estado de las mangueras, purgar el sistema, revisar las válvulas de seguridad y comprobar que no existan fugas ni burbujas en el circuito hidráulico.

    3. Desgaste irregular en neumáticos

    Este fallo no solo implica el coste del recambio, sino que puede afectar gravemente al rendimiento y la seguridad de la máquina. Las causas más habituales suelen ser:

    • Presión inadecuada

    • Mala alineación del eje

    • Suspensión deteriorada

    • Sobrecargas recurrentes

    Cómo prevenirlo:
    Controlar la presión de inflado diariamente, rotar los neumáticos cuando sea necesario y revisar el sistema de suspensión tras cada jornada exigente. Además, registrar los kilómetros o ciclos de carga por neumático ayuda a anticipar su desgaste.

    4. Fallos en sensores y sistemas electrónicos

    En los modelos más modernos con controladores electrónicos, pantallas LCD y sensores integrados, los fallos electrónicos son cada vez más frecuentes si no se hace un mantenimiento adecuado. Esto puede traducirse en:

    • Lecturas inexactas de carga, velocidad o temperatura

    • Desactivación automática de funciones clave como el retarder

    • Apagado de la máquina por detección errónea de fallos

    • Desconfiguración de módulos de control

    Cómo prevenirlo:
    Inspeccionar el cableado periódicamente, proteger conectores ante ambientes húmedos o polvorientos, y mantener actualizado el software de los sistemas cuando sea aplicable. También conviene realizar pruebas de diagnóstico por parte de técnicos cualificados.

    Consejo experto: “Detectar estos fallos cuando apenas dan síntomas permite actuar con rapidez y bajo coste. Esperar a que se manifiesten del todo es lo que dispara las facturas y deja la máquina fuera de juego.”

    Consejos expertos para mantener un dúmper como el primer día

    Más allá de las revisiones técnicas programadas y del mantenimiento profesional, la clave para alargar la vida útil de un dúmper rígido está en los hábitos del día a día. Son esos pequeños gestos, aparentemente rutinarios, los que marcan la diferencia entre una máquina que se mantiene en forma durante años y otra que empieza a dar problemas antes de tiempo.

    El operador juega un papel esencial en este proceso. Es quien más horas pasa con la máquina y, por tanto, quien está en mejor posición para detectar anomalías, registrar datos y aplicar rutinas de control y limpieza que evitan el deterioro prematuro.

    A continuación, recopilamos una serie de recomendaciones prácticas que, aplicadas de forma constante, ayudan a conservar la maquinaria en condiciones óptimas de funcionamiento.

    Registro de horas y control de cargas

    Un dúmper rígido no se desgasta solo por el paso del tiempo, sino por el uso que se hace de él. Por eso, llevar un control detallado de las horas de trabajo y de las cargas transportadas es esencial para anticipar necesidades de mantenimiento.

    Buenas prácticas:

    • Anotar las horas de operación tras cada jornada.

    • Registrar ciclos de carga y descarga, incluyendo peso estimado si no se cuenta con sistema de pesaje automático.

    • Evitar sobrecargas constantes: no solo afectan a la suspensión y los neumáticos, también acortan la vida útil del chasis y de los componentes estructurales.

    • Programar las revisiones en función de las horas de uso real, no solo del calendario.

    Este control también permite detectar patrones de uso excesivo o errores de operación que pueden corregirse a tiempo.

    Limpieza, lubricación y chequeos rutinarios

    Aunque pueda parecer un detalle menor, la limpieza regular de la máquina es crucial para evitar acumulaciones de tierra, grasa, residuos o material abrasivo que puedan afectar a los componentes.

    Rutinas recomendadas:

    • Limpiar diariamente la zona del motor, radiadores, ejes y puntos móviles expuestos.

    • Lubricar todos los puntos indicados por el fabricante, respetando el tipo y la frecuencia de aplicación.

    • Revisar visualmente el estado de latiguillos, filtros, depósitos y niveles de fluidos.

    • Chequear el correcto funcionamiento de las luces, alarmas acústicas, cámaras y sensores.

    • Verificar que la plataforma de carga sube y baja con fluidez, sin ruidos metálicos ni movimientos bruscos.

    Estos chequeos no sustituyen al mantenimiento técnico, pero permiten detectar síntomas tempranos de fallo, mantener los sistemas más desahogados y mejorar la eficiencia operativa.

    Recomendación profesional: “La prevención no es un protocolo burocrático, es una forma de trabajar. Si cuidas cada detalle a diario, el resultado se nota en cada tonelada movida.”

    Servicio de mantenimiento profesional: una inversión rentable

    En muchas ocasiones, el mantenimiento interno no llega a cubrir todas las necesidades reales de la maquinaria. Ya sea por falta de tiempo, recursos técnicos o personal cualificado, delegar el cuidado de un dúmper rígido en manos expertas no solo resuelve un problema logístico: representa una decisión estratégica que optimiza costes, reduce tiempos de parada y protege la inversión.

    Y lo más importante: contar con un servicio externo no significa renunciar al control, sino todo lo contrario. Permite disponer de una supervisión técnica continua, trazabilidad completa de las actuaciones y una respuesta más rápida ante cualquier incidencia.

    En empresas donde los dúmperes rígidos son piezas clave para mantener el ritmo de producción, externalizar el mantenimiento es una manera de asegurarse que siempre estarán disponibles, operativos y en condiciones óptimas.

    ¿Por qué contratar un servicio externo como el de Comercial Truckma?

    Comercial Truckma ofrece un servicio de mantenimiento especializado en maquinaria pesada que destaca por su enfoque integral y su alta capacidad de respuesta. Pero, más allá de eso, hay razones objetivas por las que confiar en un equipo externo puede suponer una gran ventaja:

    • Técnicos especializados en dúmperes rígidos que conocen los puntos críticos de cada modelo.

    • Equipamiento de diagnóstico profesional que permite detectar fallos antes de que se manifiesten.

    • Repuestos de calidad garantizada, con disponibilidad inmediata en la mayoría de casos.

    • Historial técnico digitalizado con cada intervención registrada y accesible.

    • Cobertura flexible, tanto si la máquina fue adquirida o alquilada en Truckma, como si proviene de otro proveedor.

    Además, al externalizar este servicio, el cliente libera carga administrativa y logística, y puede concentrarse en lo que realmente importa: producir más, con menos imprevistos y menos costes ocultos.

    ¿Qué incluye el servicio?

    👉 Consulta el servicio completo de mantenimiento aquí

    El servicio de mantenimiento de Comercial Truckma está diseñado para adaptarse a las necesidades reales del cliente. Dependiendo del tipo de operación, la frecuencia de uso o el modelo del dúmper, se pueden contratar paquetes a medida que incluyan:

    • Revisiones periódicas planificadas

    • Servicio técnico in situ o en taller

    • Gestión de repuestos y consumibles

    • Informes de diagnóstico preventivo

    • Asistencia prioritaria en caso de avería

    Además, se ofrece un acompañamiento técnico constante, con recomendaciones personalizadas basadas en el estado real de cada máquina.

    Consejo experto: “El mantenimiento no es un coste añadido, es una póliza de productividad. Y si lo dejas en manos especializadas, el retorno se nota en cada jornada que trabajas sin interrupciones.”

    Dúmperes rígidos Hitachi: mantener un gigante en plena forma

    Cuando hablamos de dúmperes rígidos, pocos nombres generan tanta confianza como Hitachi. Su gama de grandes equipos para minería y obra civil combina potencia bruta, ingeniería avanzada y eficiencia operativa. Pero esa robustez no implica que puedan prescindir de un mantenimiento riguroso. De hecho, cuanto más avanzada es la tecnología, más importante es mantenerla bien calibrada y supervisada.

    En Comercial Truckma se distribuyen tres modelos de referencia dentro de esta línea de alto rendimiento: el EH3500AC-3, el EH4000AC-3 y el coloso EH5000AC-3. Cada uno de ellos tiene sus particularidades, pero todos comparten la necesidad de una revisión experta y un plan de mantenimiento adaptado a sus exigencias técnicas.

    Características del modelo disponible en Comercial Truckma

    👉 Consulta los modelos Hitachi aquí

    ¿Qué hace especiales a estos dúmperes?
    Son máquinas diseñadas para rendir durante miles de horas bajo condiciones extremas. Entre sus características destacan:

    • Tracción mediante sistema Hitachi AC Drive, sin escobillas ni conmutadores, lo que reduce el mantenimiento y mejora la eficiencia energética.

    • Motores diésel de gran potencia, como el Cummins QSKTTA60-CE de 2.850 HP o el MTU 16V4000 C31, con sistema de enfriamiento avanzado y arranque eléctrico de 24V.

    • Chasis de estructura monobloque, con largueros rectangulares y refuerzos transversales que disipan el esfuerzo torsional en toda la carrocería.

    • Sistema de freno eléctrico y retarder integrado, ideal para pendientes prolongadas sin desgaste del sistema hidráulico.

    • Suspensión delantera tipo trailing arm con struts NEOCON, que mejora la estabilidad, el confort del operario y reduce la fatiga estructural.

    • Cabina ROPS/FOPS de alta visibilidad, equipada con climatización, amortiguadores y pantalla LCD con telemetría en tiempo real.

    • Sistemas de asistencia a la conducción, como control de crucero, retención automática en descenso y sensores antideslizamiento.

    Este nivel de tecnología permite un control superior sobre la operación, pero también requiere que cada sistema esté correctamente calibrado, lubricado, refrigerado y actualizado.

    Recomendaciones de mantenimiento específicas para Hitachi

    Si trabajas con uno de estos modelos, hay algunos aspectos clave que deben incluirse en el plan de mantenimiento:

    • Supervisión del sistema AC Drive: mantener limpios y refrigerados los componentes del armario de control, revisar las unidades de inversor y el alternador auxiliar.

    • Control de la temperatura del aceite hidráulico y de los reductores: cambios regulares y uso de fluidos compatibles con las especificaciones de fábrica.

    • Revisión periódica de la suspensión NEOCON: asegurar que no haya fugas en los struts, comprobar el estado del gas y el fluido interno.

    • Comprobación de sensores de carga, inclinación y velocidad: recalibrar si aparecen lecturas erróneas o alertas inusuales.

    • Mantenimiento del sistema de cámaras y radar anticolisión: limpieza diaria, comprobación de conectores, actualizaciones de software si procede.

    • Verificación del sistema de frenado mixto: disco seco delantero y disco húmedo trasero, además del freno eléctrico.

    Una revisión profesional debe ir más allá de las rutinas básicas. La combinación de sistemas electrónicos avanzados, potencia extrema y carga de trabajo intensiva requiere personal cualificado y herramientas específicas de diagnóstico.

    Nota técnica: “La fiabilidad de un dúmper Hitachi no depende solo de su diseño, sino del cuidado que recibe. Con el mantenimiento adecuado, estos gigantes pueden trabajar durante años con la misma eficacia del primer día.”

    Mantener un dúmper en forma es mantener tu negocio en marcha

    Un dúmper rígido no es solo una máquina de carga: es un eje fundamental dentro de cualquier operación a gran escala. Cada fallo evitado, cada revisión a tiempo y cada mejora implementada se traduce en más producción, menos paradas y una vida útil más larga para una de las inversiones más importantes de tu empresa.

    Ya sea con rutinas internas bien aplicadas, con la ayuda de un servicio profesional como el de Comercial Truckma o con un enfoque combinado, lo esencial es no dejar que el mantenimiento caiga en el olvido. No hace falta esperar a una avería para empezar a cuidar lo que mueve tu negocio.

    Y si trabajas con modelos de alta capacidad como los dúmperes rígidos Hitachi, el compromiso con el cuidado técnico debe ser todavía mayor. Tecnología y fiabilidad van de la mano… si tú se lo permites.

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